Hablar de Masada es hablar de todo un símbolo de Israel.
Si preguntásemos a un israelí qué significa para él o para ella Masada seguramente nos diría que este lugar es sinónimo de heroicidad y valentía. Razón no le falta a esta respuesta ya que los hechos acontecidos en esta fortaleza son estremecedores, son historia.
Una historia que te vamos a contar ahora.
Tabla de contenidos
Historia de Masada
La historia de Masada la conocemos gracias al historiador Flavio Josefo que participó activamente en los acontecimientos.
Josefo nos cuenta que tras la muerte de Herodes el Grande la gran fortaleza de Masada, situada en lo alto de un promontorio frente al Mar Muerto, cayó en manos del Imperio romano.
Masada pertenecía a la provincia de Judea que a su vez estaba bajo las órdenes de Roma. Sin embargo, no estaba dispuesta a obedecer para siempre.
En este momento aparecen en escena los zelotes, judíos radicales que defendían a muerte el status de independencia de Masada.
Como consecuencia de estas tensiones en el año 66 d.C se produce la Primera Guerra Judeo Romana en la que los judíos atacan varias legiones romanas en Jerusalén.
Tras los ataques acaban refugiándose en la fortaleza de Masada. Pero los romanos vuelven a recuperar Jerusalén en el año 70 d.C y es entonces cuando Roma decide enviar a Masada una legión de 8 campamentos para iniciar un gran asedio y conquistar el último bastión judío!!
Ante esta eminente amenaza Masada comienza a prepararse. Dispone de provisiones y alimentos almacenados con los que sobrevivir durante bastante tiempo. Además cuenta con un sistema de suministro propio de agua.
Pero los romanos no se dan por vencidos y construyen una gran rampa para acceder a la fortaleza. Los judíos ven cada vez más cerca su final, su rendición. Así que se reúnen y toman la decisión de morir antes de ser capturados y convertidos en esclavos del Imperio Romano.
Tras decidir por sorteo quién será el último en morir, cada uno de los hombres mata a su familia. De manera que al final sólo queda uno que también acabará con su vida.
Cuando los romanos alcanzan Masada se encuentran con una ciudad fantasma. Todos sus habitantes han muerto!
Los judíos de Masada prefirieron morir antes que vivir siendo esclavos de Roma!!!
Cómo acceder a Masada
Masada está situada en un promontorio, casi inexpugnable, sobre el Mar Muerto, a una altura de 450 metros.
Aunque esta circunstancia condiciona el acceso existen dos opciones para llegar a la fortaleza desde el Centro de Visitantes: a pie o en funicular eléctrico.
Es posible subir a la Fortaleza de Masada caminando. Para ello hay que seguir una senda autorizada conocida con el nombre de «Camino de la Serpiente». El trayecto dura 50 minutos más o menos.
Pero también hay un teleférico que llega hasta la parte más alta de las ruinas en menos de 3 minutos.
Nosotros subimos y bajamos en funicular por comodidad.
Qué ver en Masada
La visita a la Fortaleza de Masada te dejará huella. El enclave, el sonido del silencio, la historia. Son elementos, todos ellos, que hacen de Masada uno de los lugares más increíbles de Israel.
Desde el primer momento que entres en el recinto de Masada varios paneles informativos te mostrarán el recorrido que debes seguir para no perderte nada.
Además hay varios miradores en la fortaleza que regalan las mejores vistas del impresionante Mar Muerto.
En tu paseo por las ruinas encontrarás también varios mosaicos antiguos y diversos murales pintados que formaban parte de los baños romanos, construidos tras la conquista de Masada.
Pero la visita estrella del sitio arqueológico es, sin duda, el Palacio del Rey Herodes. Situado en un extremo de la Fortaleza, se trataba de la edificación más lujosa de todo el complejo y estaba construida en tres niveles.
Para hacer más cómoda la visita a Masada en todo el recinto arqueológico hay zonas de descanso y bancos, muchos de ellos cubiertos para protegerse del sol.
Y es que en esta zona del país el calor puede llegar a ser extremo en algunas épocas. Nosotros estuvimos en marzo y ya hacía bastante calor. Aun así la visita fue muy llevadera.
Precio y Horarios
La tarifa general de entrada a las ruinas de Masada es 28 shequels ( 6,5 € – marzo 2018) sin incluir el teleférico.
En caso de acceder a Masada en el cable car hay que pagar 28 shequels (solo viaje de ida) ó 46 shequels si decides regresar por el mismo medio. Nosotros subimos y bajamos en teleférico. Es rápido y cómodo.
El Parque Nacional de Masada se puede visitar en el siguiente horario:
VERANO
Domingo – jueves y sábados: 8 – 17 h
Viernes y festivos: 8 – 16 h
INVIERNO
Domingo – jueves y sábados: 8 -16 h
Viernes y festivos: 8 – 15 h
Sin duda, recorrer Masada es volver al pasado.
A mi me pareció increíble en todos los sentidos, no sólo por su localización que es impresionante sino porque es un lugar donde parece que el tiempo se ha detenido. Te traslada a otra época, a otro momento!!! Indescriptible!!!
Completa tu viaje a ISRAEL:
Me ha flipado lo de las vistas del mar muerto!!!!!! Muy buena info!!!
Siiiiii son unas vistas increíbles… para recordar siempre !!
Muchísimas gracias