San Petersburgo, la ciudad imperial por excelencia, la ciudad de los zares y los palacios, la ciudad del Hermitage, una joya bañada por las aguas del río Neva.
La segunda ciudad más grande de Rusia fue fundada por el zar Pedro el Grande en el año 1703 y se convirtió en capital del Imperio ruso durante nada más y nada menos que 200 años.
Su centro histórico y sus edificios son tan bellos que están declarados Patrimonio de la Humanidad desde el año 1990. Pasear y recorrer las calles de San Petersburgo es un placer no sólo para los sentidos, sino también para el alma.
Con esta guía para visitar San Petersburgo podrás preparar tu viaje a esta maravillosa ciudad.
Tabla de contenidos
Cómo llegar a San Petersburgo desde el aeropuerto
Vamos a suponer que llegas a San Petersburgo en avión. Si este es tu caso aterrizarás en el aeropuerto de Pulkovo, situado a 23 kms al sur de la ciudad.
La mejor manera de ir al centro de la ciudad desde este aeropuerto es utilizando el autobús 39. Éste comunica la terminal de llegadas con la estación Moskovskaya (línea 2 de metro – color azul) en apenas 25 minutos.
Esta parada es además la última del recorrido y en ella deberías bajar para poder enlazar con el metro y desplazarte hasta tu destino final.
Billete autobús 39
El precio del billete es 40 rublos (0,5 €-agosto 2018) y se compra directamente en el autobús.
Billete de metro
Cada ticket sencillo de metro cuesta 36 rublos (0,45 €-agosto 2018) aunque existe la posibilidad de comprar una especie de tarjeta monedero que puedes ir recargando a demanda y según tus necesidades.
Si solo necesitas un billete sencillo lo mejor es ir a la taquilla (ojo!! porque no hablan inglés) y comprarlo directamente.
Ten en cuenta que el billete que te darán es un token (ficha de plástico) que después tendrás que introducir en la ranura de los tornos de entrada al metro.
Qué ver en San Petersburgo
San Petersburgo es una ciudad tan monumental e increíble que el tiempo que pases en ella no te dejará lugar para el aburrimiento.
Tiene museos, palacios, fortalezas, parques inmensos y unas avenidas enormes que por momentos parecen recordar a ciudades como París o Viena.
De hecho, San Petersburgo se edificó y construyó con la intención de convertirla en la ventana de Rusia al mundo occidental y eso lo vas a notar cuando camines por sus calles.
Mapa con los lugares de interés de San Petersburgo
Museo Hermitage
Empezamos nuestro recorrido por esta gran ciudad en el Museo del Hermitage.
Abierto por primera vez en el año 1852, el Hermitage es una auténtica joya.
Contiene en su interior varias colecciones, destacando entre todas la Colección europea con obras de autores españoles, holandeses, franceses e ingleses entre otros y la Colección italiana, basada fundamentalmente en el Renacimiento florentino y veneciano.
El Hermitage se encuentra en la Plaza del Palacio y llegarás a él si recorres la Avenida Nevsky Prospekt subiendo por la calle Bolshaya.
De esta manera pasarás debajo del Arco del Triunfo que da acceso directo al museo.
La entrada al Museo del Hermitage cuesta 700 rublos (8,8 € – agosto 2018).
Lo mejor es comprar el ticket directamente allí. En el patio interior del museo hay varias máquinas automáticas a disposición de los visitantes.
Están situadas a mano izquierda y no suele haber mucha gente usándolas. Una vez comprada la entrada puedes dirigirte a la puerta principal del Hermitage.
Otra opción es adquirir los tickets por internet. El problema es que el precio es bastante superior cuando se intenta pagar con una tarjeta de crédito no emitida en Rusia.
El museo abre martes, jueves, sábados y domingos de 10:30 a 18 h.
Miércoles y viernes de 10:30 a 21:00 h. Los lunes permanece cerrado.
Para llegar al Hermitage puedes usar la línea 5 de metro (morada). La parada más cercana al museo es Admiralteyskaya.
Pero la mejor manera de ir al Hermitage es sin duda el autobús 191. Tiene parada en la misma puerta del museo y el billete sencillo cuesta 40 rublos (0,45 € – agosto 2018).
En la web oficial del Museo Hermitage puedes consultar horarios e información adicional.
Catedral de Kazán
Situada en la Avenida Nevsky Prospekt, una de las arterias principales de la ciudad, la Catedral de Kazán es uno de los lugares más espectaculares de San Petersburgo.
Construida para conmemorar las victorias militares del ejército ruso en la guerra contra Napoleón, la iglesia está dedicada a la Virgen de Kazán y es todo un símbolo de la ciudad.
Nosotros la visitamos el mismo día que llegamos a la ciudad y la verdad es que el interior es precioso. El iconostasio me llamó muchísimo la atención.
La entrada a la Catedral de Kazán es gratuita. Horario: 7 a 18 h.
Edificio Singer
Justo en frente de la Catedral de Kazán se encuentra otro de los edificios más emblemáticos de San Petersburgo, el Edificio Singer.
Construido con la idea principal de asemejarse a un rascacielos, el edificio posee una estructura metálica que consta de 6 plantas coronadas por una torre de bronce y cristal.
En cuanto a su ubicación es perfecta ya que se sitúa en la intersección de la Avenida Nevsky Prospekt con el canal Griboyedova, justo al lado de la preciosa Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada.
El Edificio Singer hace las veces de librería gigante y en ella puedes encontrar libros de todo tipo y en varios idiomas.
Además si subes a la segunda planta y entras en el café podrás disfrutar de las mejores vistas de la Catedral de Kazán.
Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada
Aprovechando que estábamos justo al lado del canal Griboyedova lo recorrimos hasta el final y llegamos a la Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada.
De estilo ortodoxo su nombre oficial es Iglesia de la Resurrección de Cristo pero se la conoce popularmente como Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada, debido al intento de asesinato del que fue objeto el zar Alejandro II en el año 1881.
El exterior de la iglesia está decorado con mosaicos que detallan escenas del Nuevo Testamento y el reinado de Alejandro. En el interior hay nada más y nada menos que unos 7000 mosaicos.
A mi me encantó. Es preciosa por dentro y por fuera. Además tuvimos la suerte de visitarla casi sin gente y eso fue un valor añadido.
La iglesia está situada al final del canal Griboyedova, en una plaza llamada Konyushennaya. El precio de la entrada es 250 rublos (3 € – agosto 2018).
No obstante, nosotros pudimos entrar sin pagar entrada. De hecho cuando llegamos ya no había nadie en las taquillas de acceso.
Diariamente de 10 a 18 h.
Catedral de San Isaac
Pero la Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada no es la única iglesia que tiene San Petersburgo. Al final de la Avenida Nevsky Prospekt, muy cerca del Almirantazgo, encontramos la Catedral de San Isaac.
Para llegar hasta ella puedes recorrer a pie toda la Avenida Nevsky Prospekt o también usar la línea 3 de metro (línea verde) y bajar en la estación Admiralteyskaya.
Construida por Pedro el Grande en su momento llegó a ser la principal iglesia de la ciudad y la catedral más grande de toda Rusia.
Hoy su cúpula de 101,50 metros domina el paisaje de la ciudad de San Petersburgo y la sitúa como la cuarta catedral más alta del mundo.
Si estás interesado en acceder a la Kolonnada (cúpula) tendrás que pagar 150 rublos (1,80 € – agosto 2018).
Tras visitar la Catedral de San Isaac cruzamos el río Neva para llegar a la Isla Vasilievsky.
Aunque Vasilievsky tiene mucho que ver nosotros nos centramos en el museo Kunstkamera. Nos encantan los museos y éste en particular a mi me llamaba mucho la atención.
Así que cruzamos desde el Hermitage por el puente Dvortsovy y llegamos al otro lado del río.
Isla Vasilievsky (Museo Kunstkamera)
Soy una apasionada de los museos y San Petersburgo posee varios muy interesantes. Al preparar este viaje a Rusia tuve claro desde el principio que visitaría el Museo Kunstkamera.
Cuando cruces el puente Dvortsovy verás un edificio enorme de color verde turquesa. Es el Museo Kunstkamera, también conocido como Museo de Etnología y Antropología.
Construido en el año 1714 por Pedro el Grande se trata del primer museo que existió en la ciudad y es famoso, sobre todo, por su colección de seres extraños, curiosidades, etc.
La verdad es que es un museo bastante raro pero a mi me gustó mucho. En sus salas se exponen más de doscientas mil rarezas, tanto naturales como humanas, pertenecientes a la colección personal del mencionado zar.
Pero si el interior es curioso el exterior no se queda atrás. Toda la fachada del Museo Kunstkamera está construida siguiendo el canon del estilo barroco ruso.
El precio de la entrada es 300 rublos (3,8 € – agosto 2018).
De martes a domingo de 11 a 19 h.
Desde el Museo Kunstkamera pusimos rumbo a Petrogrado. Nuestro objetivo: recorrer la Fortaleza de San Pedro y San Pablo.
Para ello cruzamos el puente Birzhevoy comunicado directamente con la Fortaleza.
Fortaleza de San Pedro y San Pablo
Esta gran fortaleza defensiva está situada en la Isla de Petrogrado, lugar exacto donde nació la ciudad de San Petersburgo.
Tras hacerse con este antiguo asentamiento sueco, Pedro El Grande decidió convertirlo en una ciudad occidental moderna.
La Fortaleza contiene en su interior una catedral, una antigua prisión y varios museos.
Pero nosotros estábamos interesados, principalmente, en la visita a la catedral que con su llamativa aguja de 123 metros se ve desde cualquier ángulo.
El ticket para entrar en la Catedral de San Pablo cuesta 450 rublos (5,6 € – agosto 2018).
Esta entrada permite visitar el interior de la catedral donde descansan los restos de varios emperadores y emperatrices de Rusia, desde Pedro el Grande hasta Nicolás II y toda su familia.
Los únicos que no están enterrados en este lugar son Pedro II e Iván el Terrible.
La Catedral se puede visitar diariamente de 10 a 19 h y los domingos a partir de las 11 h.
Mezquita de San Petersburgo
De la Catedral de San Pedro y San Pablo nos dirigimos a un lugar muy especial que descubrí a través de las redes sociales, la Mezquita de San Petersburgo.
Nikolai Vasíliev, arquitecto que la diseñó, buscó inspiración en el Gur-e Amir el mausoleo de Tamerlán de Samarcanda y el resultado no pudo ser más espectacular. Terminada en el año 1921, se construyó combinando adornos orientales y mosaicos azul turquesa.
La verdad es que la mezquita es preciosa aunque solo pudimos ver su exterior, ya que no estaba abierta en esos momentos.
Jamás hubiera imaginado una mezquita así en una ciudad como San Petersburgo.
Para llegar a la Mezquita de San Petersburgo tienes que cruzar el parque que hay justo a la salida de la Fortaleza.
La Mezquita en una foto de nuestro instagram:
Hasta ahora solo hemos hablado de museos, iglesias y catedrales pero San Petersburgo también es conocida por sus preciosos palacios.
En nuestra visita a la ciudad pudimos visitar dos de ellos. El Palacio de Catalina, en la localidad de Pushkin y el Palacio de Peterhof.
Palacio de Catalina
En la ciudad de Pushkin, a 25 kilómetros de San Petersburgo, se encuentra el Palacio de Catalina. El complejo forma parte de un conjunto de palacios y parques declarados Patrimonio de la Humanidad.
El palacio fue construido en el año 1717 por el arquitecto alemán Johann-Friedrich Braunstein y el fin del mismo era el disfrute personal de Catalina I de Rusia.
Más tarde, en 1752 fue reformado por la emperatriz Isabel que convirtió el edificio en una total ostentación, utilizando más de 100 kilos de oro para decorar la fachada.
La entrada al Palacio cuesta 1000 rublos (12 € – agosto 2018). La de los jardines 150 rublos (1,8 €).
Estos dos tickets se compran por separado. Primero te venden el de los jardines y después el del Palacio.
Normalmente hay largas filas para entrar en el Palacio de Catalina, así que lo mejor es ir temprano para aprovechar el tiempo. Nosotros llegamos a las 12:30 h y tuvimos que esperar más o menos una hora.
No fue mucho tiempo, pero si quieres evitar filas puedes anticiparte y comprar la entrada en la web oficial Palacio de Catalina.
El Palacio de Catalina abre de 12 a 18:45 h.
Cómo llegar al Palacio de Catalina
La manera más sencilla y económica de llegar a este palacio es usando el transporte público.
En primer lugar hay que tomar la línea 2 de metro (color azul) y bajar en la estación Movskovskaya. Una vez aquí, antes de salir al exterior hay que fijarse en las paredes laterales.
En ellas hay carteles informativos que indican en qué salida se encuentra cada uno de los autobuses que comunican la estación Movskovskaya con otras zonas de la ciudad.
1.- El autobús K-342 lleva directamente al Palacio de Catalina.
El precio del billete es 40 rublos (0,50 € – agosto 2018). Y el trayecto dura media hora más o menos. Es una opción de transporte rápida y económica.
2.- Para regresar de nuevo a San Petersburgo puedes tomar el autobús 347 (40 rublos) que vuelve al punto de origen, la estación de Movskovskaya.
Palacio de Peterhof
Peterhof es un conjunto de palacios y jardines situados en el Golfo de Finlandia, a unos 30 kilómetros al oeste de San Petersburgo.
Peterhof fue la residencia oficial de los zares hasta el año 1917 por eso popularmente es conocido con el nombre de El Versalles ruso.
Hay dos tipos de entradas disponibles. La que da acceso al Palacio, que nosotros no pudimos visitar por estar cerrado en ese momento y la de los Jardines inferiores. Nosotros solo pudimos acceder al Jardín superior (siempre gratuito) y a los Jardines inferiores.
- Entrada Jardín superior Peterhof: gratis
- Entrada Jardín inferior Peterhof: 900 rublos (11 € – agosto 2018)
En la web oficial de Peterhof puedes anticiparte y comprar la entrada.
EL horario del Palacio es de 12 a 14 h (horas más concurridas) y de 16:15 a 17:45 h.
Los Jardines inferiores están abiertos de 9 a 20 h (hasta las 21 h en verano).
El Palacio cierra todos los lunes y el último martes de cada mes por limpieza. Este fue nuestro caso y por eso no lo pudimos visitar.
Cómo llegar al Palacio de Peterhof
La forma más económica de llegar a Peterhof es combinando el metro y el autobús.
Primero hay que usar la línea 1 de metro (color rojo) y bajar en la estación Avtovo. Una vez aquí hay que cruzar la calle y tomar el autobús K-300 (40 rublos: 0,50 € – ago 2018) que para en la misma puerta de Peterhof.
Desde los propios jardines es posible regresar a San Petersburgo en Hydrofoil.
Justo al final del paseo principal de Peterhof hay un embarcadero desde el que salen estos barcos lanzadera. El trayecto hasta San Pertesburgo dura 30 minutos y la parada está delante del Hermitage.
Es un transporte muy rápido y cómodo.
Nosotros elegimos esta opción para regresar a San Petersburgo desde Peterhof. El precio del billete de Hydrofoil es 850 rublos (10 € – agosto 2018 ) y los barcos salen cada media hora más o menos.
Jardín de Verano
Ya de vuelta en San Petersburgo y teniendo en cuenta que el hydrofoil nos había dejado muy cerca del Hermitage, decidimos ir a ver el Jardín de Verano.
Considerado el parque más antiguo de la ciudad fue construido a principios del siglo XVIII en estilo barroco holandés y su estructura es totalmente simétrica.
A nosotros nos gustó mucho visitarlo. Todo el recinto está muy cuidado, es bastante grande y resulta muy agradable.
El acceso al Jardín de verano es gratuito.
Abierto todos los días de 10 a 22 h.
Catedral Smolny
La Catedral de Smolny es el monumento más alejado del centro de San Petersburgo.
La mejor manera de llegar hasta él es usanso la línea 1 de metro (línea roja) y bajando en la estación Chernyshevskaya, situada a 1 km de la catedral.
Diseñada por el famoso arquitecto Bartolomeo Francesco Rastrelli, la Catedral Smolny es un perfecto ejemplo de barroco ruso.
Fue la zarina Isabel Petrovna, hija de Pedro el Grande, quien mandó construir este monasterio donde pensaba pasar los últimos años de su vida. Por eso se edificó como si fuera una especie de palacio.
Los deseos de Isabel fueron que la iglesia imitase a la catedral de la Asunción del Kremlin de Moscú.
La construcción de la Catedral de Smolny comenzó en el año 1740 y en realidad no se trata únicamente de una catedral, sino que estamos ante un complejo formado por un convento y varias iglesias.
Nosotros tuvimos la suerte de poderlo visitar casi en solitario.
Es posible subir al campanario de la catedral. La entrada cuesta 100 rublos (1,2 € – agosto 2018).
Monasterio Alexander Nevsky
Debo confesar que no estaba entre nuestras prioridades visitar este monasterio, pero como habíamos visto ya todo lo que teníamos planeado nos acercamos a conocerlo.
Visita al Monasterio Alexander Nevsky
Para acceder al interior del complejo primero hay que cruzar un gran arco. Tras él se halla la puerta de entrada y a continuación dos iglesias, la iglesia de la Anunciación y la de la Trinidad.
Frente a ellas hay una necrópolis bastante antigua donde están enterrados varios parientes de Pedro I.
Dejando atrás el monasterio y cruzando un puente, hay otros dos cementerios muy especiales. Se trata del Cementerio Lazarev (cerrado cuando nosotros llegamos) y el Cementerio Tikhvin, que pudimos visitar.
La entrada a este cementerio nos costó 250 rublos (3 € – agosto 2018).
En él se hallan enterrados varios artistas rusos (escritores, pintores, músicos, etc) que llegaron a ser importantes personalidades del mundo de las artes. Una de las tumbas más famosas es la de Tchaikovsky, conocido compositor.
La entrada al recinto donde se encuentra el Monasterio es gratuita.
Cómo llegar al Monasterio Alexander Nevsky
El Monasterio Alexander Nevsky está al final de la Avenida Nevsky Prospekt.
Para llegar hasta él lo mejor es usar la línea 4 de metro (naranja). La parada más cercana es Ploshchad Aleksandra Nevskogo.
Completa tu viaje a SAN PETERSBURGO:
Increíble la redacción te entra ganas de viajar a Rusia
Genial post!! Muy útil por si algún día nos decidimos a visitar Rusia!
La Guia de San Petesburgo me va hacer de mucha utilidad gracias por compartir tus viajes….
Pero qué rapidez y qué completito Marta!! Ya estamos con tu información para mezclarla con lo que queremos ver, y organizando los días! Qué poquito queda 😉 Muchas gracias por toooda tu ayuda!
Elena ….qué bien que os haya gustado…Espero que os sirva de ayuda!!!! Estoy segura de que os va a encantar Rusia porque es una maravilla de país.!!!!
Seguí vuestra aventura por stories y sabía que iba a ser un post genial!!!!
Mil gracias bonita..qué bien que te guste tanto!!! Besos!!
Impresionante!!!!!, gracias por todos los datos, me va a servir muchísimo…..gracias!!!!!
Muchísimas gracias Gisela!! Qué bien que te sirva de ayuda!Cualquier duda aquí estoy!!! ;)))))
Sencillamente precioso me apetece muchísimo ir allí!!
Sin duda San Petersburgo es una ciudad increíble en todos los sentidos. Merece muchísimo la pena visitarla…es grandiosa!!!
Mucho mejor el palacio de Katalina que el de Peterhof, avisaros que si vais a San Petersburgo hay muchos robos a turistas, no tienen viiolencia pero son carteristas, actuan en el centro de la ciudad y a la entrada al metro, vigilad, a nosotros lo intentaron en tres ocasiones, suerte que en los foros estabamos avisados y que para colmo somos de Barcelona y por aqui andamos muy curtidos con el tema, por suerte no lo consiguieron.
Hola Raúl,
La verdad es que los dos palacios son bien bonitos, aunque debo decir que a mi también me gustó muchísimo más el de Catalina.
Con respecto a lo que comentas sobre robos y demás nosotros no tuvimos ningún problema ni en Moscú ni en San Petersbugo. Imagino que será como en todas las grandes ciudades, en todas hay robos. No obstante gracias por la información. Está bien saber estas cosas.
Un saludo viajero y gracias por pasarte por el blog!!!
😉